¿Último EDEPREM?



por Michelle Vázquez


Se celebró el evento deportivo más esperado y característico de los maristas.
Lleno de compañerismo, porras y sobretodo mucha emoción, se festejó de nuevo esta serie de competencias en nuestra Guadalajara linda y querida. Pero ese es solo el lado agradable de las cosas, porque también tomó mucho trabajo, dedicación y esfuerzo la realización de tal, tanto que incluso se rumoraba que nuestro colegio iba a perder la sede, que no estábamos bien organizados y había posibilidad de que fuera el último EDEPREM.
"Es una leyenda urbana" expresó el coordinador de ACUDE, Memo, quien accedió dar una exclusiva entrevista; entre los puntos más relevantes, narró que ese rumor corre año tras año y no se sabe de dónde proviene.
Entre otras aclaraciones, Memo compartió que el colegio es el único con la capacidad de hospedaje que se requiere para un evento de magnitud -a pesar de que haya colegios más grandes, como el CUM-; dijo que se reciben aproximadamente mil deportistas foráneos y entre cinco mil personas diarias durante la semana de los partidos.
Una semana antes del evento se podía sentir la presión, el estrés y la inquietud porque comenzara. Las niñas del taller de jazz, ensayaban una y mil veces hasta lograr el balance perfecto de coordinación y técnica. Los alumnos de 6º semestre, se apresuraban por la organización y revisaban sus listas incontables veces. Los de 4º semestre, comían ansias, decoraban efusivamente sus salones y hacían planes. Los de 2º semestre esperaban con entusiasmo poder compartir su primer encuentro con personas de toda la república. Y por supuesto, los maestros, quienes ya esperaban que pasara todo para que sus alumnos regresaran a su estatus normal de inquietud.
También estaban las comisiones, de las cuales no faltó quién se quejara, pues los horarios, el sol, el cansancio y mil cosas más influían; a pesar de eso, todas se realizaron perfectamente. Lo que esperaban con ansias terminó con gran satisfacción, pues en la clausura de apreció el éxito de EDEPREM una vez más. Ahora sí, ¡hasta el próximo año!

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